MUÑECO (YACO DE COLA ROJA) tuvo muy mala suerte, era un yaco reproductor y salvaje (que no ha tenido contacto con el humano prácticamente para nada), condenado a vivir en una jaula de 1×1 junto a su pareja y sin poder moverse nada más que en ese espacio. Cuando se dieron cuenta que algo le pasaba, lo vendieron y así lo vendieron en 4 ocasiones más. Su último dueño también intentó venderlo sin éxito porque su aspecto ya decía que estaba bastante enfermo.
Se lo cedieron a una colaboradora de nuestra Asociación y ella enseguida nos avisó para que lo recogiésemos. Nada más tenerlo hice un video y se lo mande a la veterinaria, lo que ella vio, no le gusto y me dijo que había que hacerle antes de nada las PCR de enfermedades infecciosas porque ella creía que era Bornavirus, efectivamente, los resultados dieron positivo en Bornavirus, una enfermedad infecciosa degenerativa y sin tratamiento.
También tenía el hígado dañado de una alimentación muy grasienta y pododermatitis por no tener perchas de varios grosores y textura, por pasar muchas horas y días en la misma percha sin moverse.
Estaba en un punto de su enfermedad que no se alimentaba por si mismo, así que le alimentamos con papilla y entre horas intentábamos que comiera alguna frutas o pienso, no es una tarea fácil cuando el ave es salvaje y no le gusta el contacto humano, pero él sabía que no le íbamos a hacer daño.
Se le bañaba todos los días para limpiar sus pumas de algunas heces que se le quedaban pegadas y aprovechábamos el baño para hacer rehabilitación con las patas y después del baño, rehabilitación con las alas, después tocaba secarnos y la medicación en las patas para la pododermatitis y a comer papilla con sus otras medicaciones y a dormir.
Así estuvo 8 meses, hasta que su enfermedad le ataco con más fuerza y su retroceso era evidente, llego el momento para que muñeco descansara.